Atentos
Economía Regional Reportajes

Actividad económica del Maule podrían tener nulo crecimiento este año según estudio de U. Autónoma

• Las exportaciones maulinas, que aumentaron un 27% en 2018, tendrán una importante baja el presente año, afectadas fundamentalmente por la guerra comercial entre EE.UU. y China.

• A pesar del gran crecimiento económico en 2018, los salarios regionales siguen siendo bajos y representan, junto a La Araucanía, el nivel de ingresos promedio más bajo del país.

La Universidad Autónoma de Chile, a través de su Centro de Estudios y Gestión Social (CEGES), presentó su estudio anual sobre la realidad social y económica de la Región del Maule, documento que entregó una panorámica del desarrollo socioeconómico local, el que se transforma en un importante insumo para la formulación de políticas públicas, decisiones de autoridades políticas, empresarios, actores sociales y para la ciudadanía en general.

La presentación estuvo a cargo del Dr. Guillermo Riquelme, y fue el resultado de un trabajo en que colaboraron investigadores del CEGES con el fin de presentar un documento que diera cuenta de la situación económica y social de la región, en particular en lo relacionado al empleo, categorías ocupacionales y niveles de ingreso, como una forma de entender los preocupantes índices de desempleo que se acentúan en algunos períodos.

Uno de los aspectos más destacables del estudio fue el análisis de los ciclos económicos de la Región del Maule, el que contempla una duración promedio de entre cuatro a seis años del ciclo completo de expansión-contracción, es decir, desde el punto en que la economía regional comienza a crecer hasta llegar a su peak, para luego decrecer hasta llegar a su piso mínimo. En este análisis se observa que cada subperiodo del ciclo tiene una duración aproximada de entre 2 a 3 años, aunque en los últimos dos años este ciclo parece ser más inestable y de menor extensión, lo que daría cuenta de la mayor inestabilidad económica mundial en que actualmente nos encontramos, dijo el investigador de la Universidad Autónoma de Chile.

COMPORTAMIENTO A NIVEL SECTORIAL

Los sectores más representativos de la economía maulina durante el 2018 fueron Silvoagropecuario, Comercio y Construcción. Según el informe, en este último se evidenció gran dinamismo el segundo y cuarto trimestre del año pasado, donde los permisos de edificación acumulados a diciembre alcanzaron al millón 330 mil 235 metros cuadrados, lo que representó un crecimiento del 20% respecto de 2017, cuadruplicando el crecimiento país.

“Hubo un comportamiento muy fuerte en la edificación habitacional, con un crecimiento de un 44%, lo que viene a reactivar un subsector de la construcción que tuvo un pésimo comportamiento el 2017 con un decrecimiento del 21,5%. 2019 no se observa tan auspicioso para el sector, y si bien se crecerá, será a tasas bastantes más bajas de lo evidenciado en 2018, sobre todo en lo referente a edificación habitacional”, precisó el Dr. Riquelme.

EXPORTACIONES, MOTOR DE LA ECONOMÍA MAULINA

Respecto a las exportaciones maulinas, el estudio del CEGES da cuenta que los envíos se vieron muy favorecidos, en especial los primeros meses del año con variaciones interanuales del 59,4% y 27,8% para enero y febrero, respectivamente, crecimiento que se mantuvo en promedio para el resto del año informado.

Esto llevó a que los envíos del sector exportador del Maule acumularán a diciembre de 2018 US$2.846 millones, lo que representa un crecimiento de un 27% respecto de 2017, siendo los sectores Silvoagropecuario e Industrial los que más aportan al dinamismo del sector exportador.

“La fruticultura y la fabricación de celulosa, y sus derivados de papel y cartón, figuran como los principales productos de exportación de la región, siendo China y EE. UU. nuestros principales socios comerciales. Lamentablemente, 2019 no será un buen año para el sector exportador maulino, de hecho, durante el primer trimestre las exportaciones tuvieron un decrecimiento en torno al 5% y se proyecta que esta situación no mejorará sustancialmente durante el resto del año”, aseguró Riquelme.

AGRICULTURA Y COMERCIO CONCENTRAN EMPLEO MAULINO

En cuanto al análisis de los ocupados en la Región de Maule, el informe observa que el sector Silvoagropecuario sigue liderando la ocupación regional con una participación del 24,7% con más de 121 mil ocupados en 2018. Le sigue el sector Comercio con una participación del 17,36% con más de 85.000 ocupados, asomándose como relevantes el empleo vinculado a los sectores Industrias Manufactureras y Construcción con una participación en la ocupación regional del 9,24% y 7,84%, respectivamente.

Por otro lado, si bien se observa a nivel global un aumento de los ocupados, lo cierto es que la participación del sector Silvoagropecuario ha perdido participación en los últimos años, mientras, por el contrario, los sectores asociados al Comercio y Servicios han crecido paulatinamente en la participación del trabajo regional.

“Si realizamos un análisis más exhaustivo del tipo de trabajo que desempeñan los ocupados en la Región del Maule, podemos apreciar que la zona presenta dentro de todas las ocupaciones identificadas, una importante participación de sobre el 30% de trabajadores no calificados, seguidos de los trabajadores ocupados como operarios y artesanos con un 13%. Es más, si comparamos la región con el país, la participación de trabajadores no calificados del Maule supera en más de 5% al promedio de trabajadores no calificados del país, que sólo alcanza el 21,3%”, explicó el académico.

BAJO NIVEL EDUCACIONAL, BAJA PRODUCTIVIDAD Y BAJOS SALARIOS

Vinculándose con lo anterior, el estudio sostiene que en la Región del Maule sólo un 16,2% de los ocupados posee educación universitaria.

“Como bien señala la economía, existe una relación entre bajos niveles de escolaridad con mano de obra de bajo nivel de productividad y, por ende, con bajos niveles de ingreso. Históricamente, nuestra región ha presentado una mayor participación de trabajadores con enseñanza básica y media, lo que representa el 75,4% del total de ocupados. Dada esta configuración, el mercado laboral en la región posee un bajo nivel de ingresos, asociado al tipo de ocupación y al nivel educacional de las personas. Es más, los salarios no solamente sólo son bajos, sino que representan junto a La Araucanía, el nivel de ingresos promedio más bajo a nivel nacional.  En suma, en nuestro país, la diferencia de ingresos en Chile se produce precisamente por la educación, que para sus distintos niveles reporta una rentabilidad muy distinta. En este escenario, las personas que poseen sólo educación básica (trabajo no calificado) son, a su vez, los que menos perciben ingresos, y por el contrario, aquellos con educación superior (trabajo calificado) son los que mayores ingresos reciben. No obstante, se debe destacar que los ingresos de los profesionales también han evidenciado en los últimos 10 años una gradual disminución”, concluyó Riquelme.

Noticias relacionadas

Inauguraron estación de enfermería en sector rural “La Puntilla” de Longaví

Diario Atentos

Ex ministra Cecilia Pérez inauguró Año Académico 2017 en sede Talca de la Universidad Autónoma de Chile

Diario Atentos

Fieles católicos recordaron al obispo Carlos González a doce años de su fallecimiento

Diario Atentos