La Unesco oficializó la incorporación del circo de tradición familiar de Chile a la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, destacando más de dos siglos de historia transmitida por familias itinerantes que mantienen viva esta expresión artística en todo el país. El anuncio se realizó durante la reunión del Comité Intergubernamental en Nueva Delhi.
El reconocimiento valora no solo su aporte cultural, sino también su rol social, ya que los circos organizan funciones solidarias, acompañan a comunidades afectadas por desastres naturales y promueven espacios inclusivos para mujeres, personas LGTBIQ+ y artistas marginados. Desde la subsecretaría de Patrimonio Cultural celebraron la decisión, subrayando que se trata de un homenaje a las familias que han preservado este oficio generación tras generación.
Chile presentó un plan de salvaguardia que contempla fortalecer la protección laboral, sindicatos y asociaciones circenses, además de crear un archivo nacional y ampliar la formación para nuevas generaciones. Con esta inclusión, el país suma un nuevo elemento a su patrimonio inmaterial, junto al baile chino y la alfarería de Quinchamalí y Santa Cruz de Cuca.

