Un serval atacó a un ejemplar de guacamayo en frente a los visitantes del Buin Zoo, incluyendo niños y niñas, lo que generó preocupación entre los asistentes, pero también críticas por los protocolos de seguridad.
Un trágico desenlace tuvo la tarde del domingo un show en Buin Zoo, que involucró a un serval -también llamado leopardo jaspeado- y a un guacamayo.
Durante una actividad educativa, y según se observa en un video que se viralizó, el felino se abalanzó sobre el ave, la que murió más tarde producto de las heridas.
Esto, mientras el animador de la muestra aseguraba que estaba “todo bien”.
Consultados por Emol, desde Buin Zoo señalaron que “durante una de nuestras muestras educativas se produjo un incidente en el que un serval se abalanzó de forma inesperada sobre uno de nuestros guacamayos”.
“El rápido accionar del equipo de Bienestar Animal logró tomar al ave y derivarla al Hospital Veterinario de nuestra institución, donde recibió atención de urgencia. Pese a nuestros esfuerzos, lamentablemente falleció a las pocas horas producto de las heridas”, precisaron.
Agregaron que “como una institución dedicada a la educación familiar sobre la flora y la fauna, desarrollamos diversas muestras educativas con animales en vivo cada fin de semana. Estas actividades permiten a los asistentes aprender sobre las distintas especies participantes, con el fin de sensibilizarlos sobre sus amenazas en vida silvestre y cómo todos los ejemplares que están en el Bioparque llegaron precisamente por la imposibilidad de vivir en su hábitat natural”.
“Esta situación, completamente fuera de lo normal y que no se había producido en los más de 10 años en que desarrollamos estas actividades, nos tiene profundamente dolidos, teniendo en cuenta que esta ave nació en el Bioparque y fue criada a mano por sus cuidadores, desarrollando un vínculo afectivo muy profundo con ellos y con todos quienes somos testigos diariamente de su trabajo realizado con cariño y dedicación”, agregaron.
El incidente generó condena en redes y medios, con críticas centradas en la seguridad del recinto, especialmente por la presencia de niños como espectadores directos del accidente.
Muchos cuestionan la probabilidad de riesgos al mezclar aves y felinos en un espectáculo tan cercano al público.