La Contraloría General de la República descubrió serias falencias en los controles de tránsito realizados por Carabineros entre 2023 y 2024, revelando que 626 vehículos con encargo por robo fueron fiscalizados, pero nunca retirados de circulación, como exige la ley. Además, en más de 145 mil controles, la policía uniformada ni siquiera ingresó al Sistema Unificado de Encargo y Búsqueda de Vehículos (SEBV) para verificar la situación legal de las patentes revisadas, según consignó la auditoría N°158 conocida por Informe Especial.
Las irregularidades también incluyen 869 partes cursados a vehículos que circulaban sin patente, sin revisión técnica, con números de motor adulterados o con vidrios polarizados fuera de norma, casos en los cuales, pese a las infracciones, los autos no fueron sacados de las calles. Carabineros argumentó que no pudo retirar los vehículos debido a la falta de espacio en el aparcadero municipal de Melipilla, que estaría colapsado desde 2024.
Ante estos antecedentes, Contraloría instruyó un sumario administrativo para determinar responsabilidades y remitió la información al Ministerio Público. Este nuevo hallazgo se suma a recientes auditorías que han cuestionado a Carabineros, como la detección de más de 200 armas registradas a nombre de personas fallecidas o con antecedentes penales, situación que también está siendo investigada por la Fiscalía.