La Conmebol confirmó este viernes la cancelación oficial del partido entre Colo Colo y Fortaleza por Copa Libertadores, tras la invasión de barristas albos que irrumpieron en el campo de juego a los 70 minutos. Los hinchas rompieron una barrera de acrílico en el sector norte del Estadio Monumental, obligando a suspender el encuentro por razones de seguridad. Pese a los intentos iniciales por reanudar el juego, finalmente se optó por darlo por cancelado.
Según el reglamento de la Conmebol, la cancelación del partido atribuye toda la responsabilidad al club organizador, en este caso Colo Colo, que ahora enfrenta la posibilidad de recibir severas sanciones. Entre ellas, se incluye la eventual descalificación del equipo de futuros torneos continentales, así como sanciones económicas y disciplinarias, dependiendo de lo que determine la Comisión Disciplinaria de la organización.
El Manual de Clubes de Conmebol señala que el club afectado deberá asumir los daños causados y posibles perjuicios financieros. Además, advierte que la institución sancionada deberá responder civil y legalmente por las consecuencias del hecho, dejando a la Conmebol libre de toda responsabilidad. Con este panorama, el «Cacique» podría enfrentar uno de los momentos más críticos en su historial internacional.