Alberto Carlos Mejía Hernández, sicario venezolano acusado del asesinato del empresario José Reyes Ossa, conocido como el “Rey de Meiggs”, abandonó Chile el 12 de julio, apenas dos días después de haber sido liberado por un error judicial. Según fuentes de Radio Bío Bío, cruzó hacia Perú por un paso no habilitado en la zona de Chacalluta, tras haber viajado previamente a Iquique y Arica.
El sujeto fue formalizado el 9 de julio bajo una identidad falsa, “Osmar Ferrer”, pero un error de tipo en la resolución judicial derivó en su liberación. A pesar de que se intentó corregir la situación horas más tarde, Gendarmería ejecutó la orden de libertad el 10 de julio, permitiéndole escapar. Actualmente, Interpol emitió una alerta internacional en su contra, y las policías chilenas trabajan en su recaptura.
La cadena de errores —incluido el uso de identidad falsa y la confusión de tramitación judicial— está siendo investigada por la Fiscalía Occidente y la PDI, mientras que la Fiscalía Oriente y Carabineros buscan dar con su paradero. El caso ha generado fuertes cuestionamientos al sistema judicial y penitenciario por la insólita fuga de un imputado de alta peligrosidad ligado al Tren de Aragua.
