El hecho ocurrió cuando Rosa, una vecina de la zona, se encontraba sentada en el jardín de su vivienda. Según relató, una mujer desconocida ingresó al lugar solicitando un vaso de agua, asegurando que se sentía mal.
“Entró y me dijo que quería un vasito de agua. Cuando yo me paré, ella entró al tiro, me empujó para adentro y cerró la puerta”, narró la víctima, visiblemente afectada. Una vez dentro de la casa, la agresora comenzó a exigirle dinero, llevándola hasta su dormitorio mientras insistía: “La plata, la plata, la plata”.
Rosa relató que fue arrinconada entre el clóset y la cama por la delincuente, quien además buscaba documentos de herencia, aunque la víctima aseguró no tener tales papeles ni ser la propietaria de la vivienda. Al no encontrar lo que buscaba, la mujer sustrajo otros objetos personales.
“Lo que me llevó fue un regalito que me había hecho una sobrina, unos cosméticos bien bonitos, los tomó y salió”, lamentó Rosa. La situación le provocó un fuerte impacto emocional, dejándola paralizada por algunos minutos, lo que le impidió salir de inmediato a pedir ayuda. Al momento del asalto, cerca de las 15:00 horas, no había vecinos en el exterior.
Las cámaras de seguridad del sector captaron a la autora del robo saliendo tranquilamente de la casa y subiéndose a un vehículo tras cometer el delito.
El hecho más doloroso para Rosa fue la pérdida de sus pertenencias más valiosas: “Se llevó mis anillos, mi anillo de matrimonio, todos mis anillitos, y toda mi plata: todo mi sueldo de mi pensión, que eran como 250 mil pesos más o menos”.
Investigación en curso
La familia de la víctima interpuso la denuncia correspondiente, y Carabineros está analizando las imágenes de seguridad para dar con el paradero de la autora del robo.
Este caso ha generado preocupación entre los vecinos del sector por el nivel de vulnerabilidad en que quedan los adultos mayores frente a delitos como este, especialmente cuando se cometen mediante engaños y apelando a la buena voluntad de las personas.