Durante las últimas horas se dio a conocer la identidad del único gendarme que permanece prófugo en el marco de la investigación por una extensa red de corrupción al interior de recintos penitenciarios de la Región Metropolitana. Se trata de Luis Bravo Pigatti, funcionario identificado como parte de la indagatoria que involucra principalmente a las cárceles Santiago 1 y San Joaquín.
La causa, denominada “Operación Apocalipsis”, ya suma 45 gendarmes activos detenidos, incluidos cuatro funcionarios aprehendidos en flagrancia por otros delitos, cuya eventual vinculación con la estructura criminal sigue siendo investigada. En los últimos días, uno de los implicados, Juan Gutiérrez Acuña, se entregó voluntariamente, reduciendo a uno el número de funcionarios pendientes de captura.
A pocos días de la formalización, que se realizará este viernes en el 12° Juzgado de Garantía de Santiago, expertos advierten sobre las dificultades de investigar delitos dentro del sistema penitenciario. Según especialistas, el carácter cerrado y jerárquico de las cárceles, sumado a posibles redes de protección internas, representa uno de los principales desafíos para el avance de este tipo de investigaciones.

