«El balance podría evolucionar», agregó el portavoz del ministerio Wahid Majroh, a la cadena de televisión Tolo News.
Poco antes, una periodista de la AFP, presente en la morgue del hospital Wazir Akbar Khan de Kabul, había dado cuenta de la muerte de 14 personas.
Pero otras víctimas fueron trasladadas al hospital de la ONG italiana Emergency.
El primer atentado tuvo lugar en un sector cercano a la sede de los servicios de inteligencia afganos (NDS) en Kabul.
En el segundo atentado, perpetrado 30 minutos después por un kamikaze que se encontraba en medio de un grupo de periodistas acudidos al lugar, murió el fotógrafo Shah Marai, jefe del servicio fotográfico de la oficina AFP de Kabul.
Shah Marai trabajaba desde 1996 para la AFP y había cubierto en particular la invasión estadounidense de Afganistán en 2001, consecutiva a los atentados de Al Qaida en Nueva York y Washington.
«El kamikaze se hizo estallar entre los periodistas y causó víctimas», dijo a la AFP el portavoz de la policía de Kabul, Hashmat Sanikzai.
Los otros tres periodistas muertos en la segunda explosión trabajaban para las televisiones afganas, uno de ellos para la cadena Tolo News.
