Durante su visita a Italia, el Presidente Gabriel Boric estableció por primera vez un vínculo directo entre el régimen de Nicolás Maduro y el secuestro y homicidio del exteniente venezolano Ronald Ojeda, ocurrido en Chile. En el marco del seminario conmemorativo de los 50 años del atentado contra Bernardo Leighton y su esposa, el Mandatario advirtió que “las dictaduras y los líderes autoritarios cruzan fronteras para imponer el miedo cuando creen que pueden hacerlo impunemente”.
Boric recordó una serie de atentados perpetrados en el extranjero durante la dictadura chilena, señalando que estas acciones fueron posibles gracias a la cooperación entre regímenes autoritarios. En ese contexto, afirmó que “uno de los sospechosos de haber perpetrado el asesinato [de Ojeda] es el mismo régimen del dictador Nicolás Maduro, que se robara las elecciones en su patria”. Asimismo, instó a las fuerzas progresistas a ofrecer alternativas de progreso frente al odio y la intolerancia.
Pese a sus críticas al gobierno venezolano, llamó la atención el silencio del Presidente sobre el reciente Premio Nobel de la Paz otorgado a la líder opositora Ana Corina Machado. Mientras el canciller Alberto van Klaveren celebró el reconocimiento destacando su liderazgo “en un contexto de régimen dictatorial”, Boric no se ha referido públicamente al galardón, manteniendo una postura de prudencia frente al escenario político venezolano.