La expresidenta Michelle Bachelet arribó a Uruguay y se reunió con el mandatario Yamandú Orsi en un encuentro que destacó la agenda regional y de género; y abordó también la candidatura de la exmandataria a la ONU.
El encuentro tuvo lugar en la tarde del pasado miércoles 8 de octubre.
Bachelet agradeció la reunión, que estaba pactada desde el encuentro que sostuvieron en septiembre en la ciudad de Nueva York.
Su visita a Uruguay responde específicamente a su participación en un taller sobre mujeres en política entre el 8 y el 9 de octubre.
Actualmente, Michelle Bachelet se desempeña como vicepresidenta del Club de Madrid.
Esta organización se define como un foro de expresidentes y primeros ministros democráticos a nivel mundial e impulsó la actividad en Uruguay.
Su objetivo central es fortalecer la práctica democrática inclusiva y mejorar el bienestar de las personas.
Sobre el diálogo en Montevideo, Bachelet aseguró que mantuvieron una conversación cordial. Los temas centrales fueron la importancia de trabajar unidos ante los desafíos globales, el multilateralismo y el rol de Naciones Unidas.
Uno de los puntos más destacados de la conversación fue la necesidad de que la próxima secretaria general de la ONU sea una persona de América Latina e, idealmente, una mujer.
Este tema cobra especial relevancia dada la postulación de la expresidenta para asumir ese cargo.
Consultada sobre la propuesta que el presidente Gabriel Boric hizo para que ella ocupe dicha posición. “Conozco muy bien Naciones Unidas, he sido Presidenta de mi país, y sin duda creo que Naciones Unidas ha jugado y va a seguir jugando un rol fundamental en un mundo de paz, un mundo donde todos podamos tener una vida mejor, así que mi compromiso es ese, pero ya hablaremos más adelante”, señaló.
“Vamos a dar toda la fuerza para que sea una mujer y de la región“, concluyó Bachelet sobre este objetivo.
Recordemos que el pasado 23 de septiembre, Bachelet ya se había referido a esta postulación. En esa ocasión, afirmó que era “un honor” que Boric la propusiera en público, ante la Asamblea General de la ONU, como candidata a la secretaría general de la organización.
De concretarse, sería la primera mujer en liderar la ONU en sus 80 años de historia.