Seis de los nueve excadetes de Cobreloa imputados por la violación grupal de una joven en la llamada Casa Naranja quedaron en libertad luego de que la Corte de Apelaciones acogiera un recurso presentado por sus defensas. La decisión judicial se originó en un error del fiscal a cargo, Eduardo Peña, quien no entregó todos los antecedentes de la investigación, lo que fue aprovechado por los imputados para solicitar el cambio de medida cautelar.
La resolución, confirmada este miércoles 3 de septiembre, modificó la prisión preventiva que cumplieron los acusados por arresto domiciliario total. Este traspié se suma a las dificultades que ha enfrentado la investigación, iniciada en 2021 pero archivada inicialmente sin responsables, y reabierta recién a fines de 2023 tras la presión mediática y parlamentaria.
Según la denuncia, la agresión ocurrió durante la noche del 16 de septiembre de 2021, cuando la víctima fue invitada a la residencia de los cadetes en Calama. Allí habría sido golpeada, amarrada y atacada sexualmente por ocho de los jóvenes, mientras otro grababa el hecho para difundirlo por videollamada. La liberación de los imputados ha generado preocupación sobre la solidez del proceso judicial y la protección de los derechos de la víctima.
