El presidente del Partido Republicano, José Antonio Kast, presentó este lunes su “Plan Cancerbero”, una propuesta que busca recuperar el control del Estado en los recintos penitenciarios y desarticular a las bandas criminales que operan desde su interior. Inspirado en el guardián mitológico del inframundo, el plan contempla medidas estrictas como el aislamiento total de líderes criminales, prohibición de teléfonos y visitas, y la implementación de tecnología de seguridad como inhibidores de señal, escáneres corporales y sensores térmicos.
La iniciativa se estructura en cuatro pilares: control penitenciario, profesionalización de Gendarmería, infraestructura carcelaria y reinserción real. Entre sus principales medidas se incluyen la construcción de cárceles de máxima seguridad para internos peligrosos y extranjeros, el fortalecimiento de Gendarmería con protección de identidad y vinculación al sistema de inteligencia, y la obligatoriedad de programas laborales para los internos, especialmente aquellos con consumo problemático de drogas.
Durante la presentación, Kast señaló que “la valentía la han demostrado nuestras policías y Gendarmería; lo que ha faltado es coraje político para tomar decisiones firmes”. La propuesta ha generado debate por su enfoque severo en seguridad penitenciaria, situándose como una de las principales banderas del abandonado republicano de cara a las elecciones presidenciales de 2025.
