La defensa de Eddie Odgers, imputado por un doble atropello fatal en un servicentro de Providencia, prestó declaraciones tras decretarse la prisión preventiva en contra de su representado, apuntando a presuntos problemas de salud del detenido, quien, según su hipótesis, no habría huido ni se habría dado cuenta de los hechos.
“A nuestro juicio, nuestro defendido efectivamente tiene problemas de salud bastante complicados, que lo hace muy vulnerable a un sistema como, por ejemplo, la prisión“, planteó el abogado César Moya.Asimismo, el jurista agregó: “Yo siento mucho lo que pasó con los familiares. Igual les mando un abrazo a ellos, pero la justicia tiene que seguir“, afirmó.
Moya detalló que apelaron en audiencia, pero la jueza no acogió esta acción, dejando tras las rejas a Odgers.
El abogado sostuvo que, si bien cree que todas las personas que conducen en estado de ebriedad “deben salir de las calles”, apuntó a una “cuestión cultural”.
A eso añadió la puesta en duda de los efectos de la Ley Emilia (20.770) tras su publicación.Por otro lado, ante la consulta de la prensa, señaló que Odgers “está muy arrepentido“.
También aludió a razones médicas que habrían producido “una desviación” en el actuar de su defendido y afirmó que no escapó.“Él en el camino no iba huyendo, iba a la misma velocidad que el resto“, aseguró, junto con entregar la teoría que maneja la defensa del imputado.
“Nosotros tenemos una hipótesis que probablemente no se haya dado cuenta, por eso se fue“, complementó.
César Moya además recalcó las limitaciones de visibilidad dentro de la camioneta debido a su tamaño y a la “maniobra bastante temeraria” que habría hecho el bombero del servicentro atropellado, quien presuntamente habría intentado detener el vehículo.
“Faltan muchos elementos todavía, estamos en un estadio procesal iniciático, y a futuro vamos a poder poner las pruebas necesarias para poder acreditar lo que pasa. No nos olvidemos que esto es una tragedia. Sin embargo, esta tragedia tiene un contexto que es la legalidad“, concluyó.